El estudio de las minorías étnicas no indígenas en México se inició en el INAH en 1974, con el propósito de conocer y analizar la participación de las minorías de origen extranjero en el proceso histórico de México durante el período comprendido entre los siglos XVI hasta la mitad del XX. Se trata de un enfoque de la cultura nacional más amplio que el de la dicotomía español-indígena que hasta principios del siglo XX se planteaban como los dos componentes básicos de nuestra nación.
Al investigar la confluencia de otras culturas se obtiene una perspectiva que permite un análisis incluyente de nuestra diversidad étnica y cultural.
En Inmigración y diversidad cultural en México se propone una metodología común para abordar la inmigración africana, europea y asiática. Al obtener materiales comparativos se podrá establecer en cada caso: su importancia demográfica y social, su peso económico y político, sus características culturales de origen, los procesos de su integración o asimilación y sus aportes a la cultura nacional.
En el pluralismo y la diversidad reconociendo nuestras múltiples raíces, podemos contribuir a consolidar un nuevo proyecto de unidad nacional.
Afroamérica I Luz María Martínez Montiel
La ruta del esclavo o Trata Atlántica involucró a tres continentes: Europa, África y América. Desde principios del siglo XVI, el ingreso masivo a las colonias americanas de africanos producto del infame comercio de seres humanos, transformó al mundo en un proceso de globalización.
La mano de obra esclava contribuyó significativamente a la construcción de América. En Europa, las colosales ganancias obtenidas del tráfico financiaron la revolución industrial. En África, regiones enteras quedaron despobladas y sin la fuerza de trabajo imprescindible para el desarrollo del continente. Con la introducción en el Nuevo Mundo de cerca de 40 millones de esclavos a lo largo de casi cuatro siglos que duró el tráfico negrero, los mestizajes dieron origen a lo que hoy llamamos Afroamérica. Los buques negreros transportaron con los hombres, mujeres y niños africanos sus dioses, creencias y tradiciones que conformaron nuestra tercera raíz.
Afroamérica II Luz María Martínez Montiel
La captura masiva y el posterior traslado forzado de los africanos, así como su ingreso en las colonias americanas como esclavos tuvieron repercusiones en los tres continentes involucrados en este tráfico humano: Europa, África y América. Desde los primeros tiempos se produjeron complejos procesos de mestizaje e interculturalidad: los esclavos se integraron primero en la economía, al tiempo que se ubicaron en la estructura social y evolucionaron hasta llegar a la transformación de su cultura original y de las culturas americanas con las que entraron en contacto. Las comunidades afroamericanas han dejado su huella en la cultura de diversos países de forma específica en cada uno de ellos. Actualmente, las poblaciones descendientes de los esclavos africanos son parte de la problemática de cada país en el que están insertas, y en alguno de ellos son objeto de marginación y discriminación, sufriendo con mayor intensidad las carencias materiales y culturales. En este texto la autora realiza una síntesis de las causas y consecuencias que tuvo la presencia africana en el desarrollo económico, social y cultural de América.